¿A dónde se fue Lionel Messi tras la pausa por la pandemia? Se lo preguntan sus millones de seguidores y lo sufre un perdido FC Barcelona, que siente de inmediato el impacto el bajón de nivel de su ídolo.
Messi jugó todos los nueve partidos desde el regreso de LaLiga, el pasado 17 de junio. No descansó ni un solo minuto. Y eso, que es usual, esta vez se está notando en su rendimiento.
Los números son claros: pasó de un promedio de 0,77 goles por partido a 0,33 (solo marcó contra Mallorca y de penalti contra Leganés y Atlético).
Sus remates a puerta pasaron de 2,39 a 1,33 en promedio, sus regates ya no son 6 por juego sino 5,89 y la imprecisión le pasa factura: pasó de errar 9,81 veces a 12,11 cuando busca a sus compañeros. No son números malos para un futbolista normal, pero sí para el mejor del mundo.
El propio técnico Quique Setién dice que han hablado del agotamiento, pero al temporada no ha dado respiro y la cacería al Real Madrid obliga a tenerlo siempre en el campo.
Pero la preocupación no termina. Según los datos de MisterChip, "Messi ha jugado siete partidos consecutivos y completos en los que solo ha anotado un gol (de penalti). Es la PRIMERA VEZ que le sucede algo así en sus 15 años de carrera profesional".
Lo que muchos, él mismo incluido, resaltan es que no ha sido tan claro a puerta pero sí en sus asistencias: pasa de 0,52 a 0,89 por partido. Una faceta solidaria que no es despreciable pues "Messi ha participado (marcando o asistiendo) directamente en 24 de los últimos 31 goles que ha anotado el Barça en La Liga. Desde que se reanudó La Liga es responsable directo de 9 de las 13 asistencias que ha firmado su equipo (3 de Alba, 1 de Suárez y 1 de Firpo)", según el estadígrafo.
FC Barcelona ha disfrutado siempre de su solidaridad esta temporada a tal punto que el argentino rompió su propio récord de pases para gol: lleva 21 en 2019-20 (sumó 20 en 14/15 y 19 en 10/11).
Pero su claridad para definir es lo que ahora se extraña. Está bien ser el mejor asistente en los últimos 25 años, pero lo que impactado a su equipo, que ve al Madrid a punto de ser campeón y con 4 puntos de ventaja, es que la definición no es la misma.
Muchos comparan la situación con la de Cristiano, que lo ha superado y va por la Bota de Oro de Europa, cuando estaba en el Real Madrid y Zidane lo convenció de dosificar y jugar menos, lo que redundó en mejor rendimiento y un nuevo título de Champions League. ¿Pasará con Messi? FC Barcelona teme no tener el fondo de armario para permitirle un descanso.