Este miércoles el Nápoles de David Ospina derrotó sin mucha dificultad 3-1 a Estrella Roja por la quinta fecha de la Champions League y se mantuvo en el primer puesto del grupo C, con nueve puntos, y muy cerca de lograr su clasificación a la siguiente fase del campeonato.
Nápoles tomó control del balón en los primeros minutos y adelantó líneas para dominar el campo del equipo serbio, que esperaba resguardado cerca de su sector defensivo, sin mucho despliegue en ataque.
Los italianos se mostraban cómodos en los primeros minutos, pues no tenían mayor presión en medio campo, y podían circular la pelota con facilidad. Estrella Roja, pese a que se resguardaba no logra desconectar las intenciones ofensivas, ni proponía un muro muy difícil de romper para los locales.
Así, a los 10 minutos Nápoles logró abrir el marcador. En el cobro de un tiro libre, la defensa serbia tuvo una desatención, cuando el eslovaco Marek Hamšík le ganó la espalda a un zaguero y simplemente tuvo que tocar el balón con la pierna izquierda.
Los italianos siguieron creando peligro, y a los 14 minutos tuvieron una nueva llegada que no pudo concretar el belga Mertens frente al arquero rival.
Sin embargo, al minuto 21 Estrella Roja se sacudió y tuvo una opción clara. En una despuntada por izquierda, Stojiljković llegó al área y remató fuerte, sin embargo el colombiano David Ospina respondió oportunamente para evitar la igualdad, aunque el balón quedó en un rebote que la defensa despejó correctamente.
Pero el dominio de Nápoles no se puso en peligro, y rápidamente retomó el control de balón y llevó peligro a la zona visitante: el defensa Koulibaly ingresó al área y tuvo una clara opción de gol.
El segundo gol llegó al minuto 32. En una jugada rápida por izquierda, Mertens recibió un centro que golpeó a un defensa de Estrella Roja, y quedó completamente libre para tocar la pelota y ampliar el marcador a favor de los locales.
Rápidamente en la segunda parte Nápoles amplió el marcador: a los 51 minutos, Hamšík envió un pase largo preciso para el belga Mertens, quien ganó en velocidad a los defensores visitantes y dio un golpe fino a la pelota para que inflara la red por tercera vez. El equipo italiano dominaba.
No obstante, los serbios lograron descontar rápidamente: al minuto 55, en una buena jugada colectiva, el alemán Marko Marin, envió una pelota entre líneas de la defensa napolitana, y habilitó a Nabouhane para que rematara al palo derecho.
Luego del 3-1, el partido perdió intensidad: Nápoles era menos profundo, y Estrella Roja no lograba dominar la pelota con la constancia necesaria para generar peligro y recortar más el marcador. Sin mayores emociones durante el resto del segundo tiempo, el juego terminó con el mismo marcador, y acercó a los locales a su clasificación.
