Sadio Mané fue presentado finalmente como refuerzo de Bayern Munich, su casa a partir de ahora y hasta el 30 de junio de 2025.
A sus 30 años, el campeón africano con Senegal rompe una sólida y feliz historia con Liverpool, al que llegó en 2016 procedente del Southampton, con el que ganó todo: una Premier, una Copa y una Copa de la Liga, la Champions League de 2019, una Supercopa de Europa y un Mundial de Clubes. Antes pasó por el Metz de Francia y el Red Bull Salzburgo.
"Estoy muy contento de estar finalmente en el Bayern de Múnich. Tuvimos muchas conversaciones y desde el principio sentí el gran interés de este gran club, así que no tuve ninguna duda desde el principio: este es el momento adecuado para este reto. Quiero conseguir muchas cosas con este club, también a nivel internacional. Incluso durante mi estancia en Salzburgo, seguí muchos partidos del Bayern, ¡me gusta mucho este club!", aseguró Mane durante su presentación, junto a Oliver Kahn.
Aunque era su momento estelar, Mané no pudo evitar la pregunta del diario Bild sobre cómo veía la permanencia de Robert Lewandowski en el equipo y si esperaba que finalmente saliera: "No soy un jugador que se centre en este tipo de cosas. Vine aquí por el Bayern de Múnich y haré lo que sea para ganar títulos con mis compañeros", dijo, regateando un poco el incómodo momento.
A su turno, Hasan Salihamidzi, director deportivo del club, fue categórico sobre el futuro del polaco, quien públicamente ha pedido salir, pues solo le queda un año de contrato y ya tendría un acuerdo con FC Barcelona: "nuestra posición es clara en este asunto: el contrato de Robert se extiende hasta verano de 2023. Doy por hecho que veré a Robert en la ciudad deportiva cuando comience la pretemporada el 12 de julio”.