Frente a Junior fue más de lo mismo: tuvo control del balón pero falta de definición... como dirían las abuelas, "es como tener la mama pero muerta". La pandemia parece que afectó las estructuras defensivas que se contagiaron de la desconfianza y ahora son una de las más vulneradas con seis tantos permitidos.
Y todos los números son malos, solamente mire: nueve fechas sin ganar por torneo colombiano, cuatro derrotas consecutivas, cuatro puntos conseguidos de 18 posibles, seis goles encajados en tres partidos, ningún gol marcado en 270 minutos... ¿seguimos?
"Hay un ambiente difícil en el grupo y eso es lo que hay que vencer primero porque es el primer tema que hay que tiene que solucionar Nacional. No podemos desesperarnos y es en estos momentos cuando más tranquilos debemos estar", dijo el técnico Suárez al término de la derrota en Barranquilla.
Por más jugadores de cartel que se pongan la camiseta verdolaga, por más técnicos exitosos que lleguen al banquillo, por más marcas internacionales patrocinen la indumentaria, si no hay fortaleza mental y confianza de grupo, toda seguirá siendo igual.
Si observan las declaraciones del técnico Santa durante los cuadrangulares semifinales del torneo anterior y las del profesor Suárez, encontraran que nada ha cambiado:
"En lo futbolístico creo que seguimos mejorando pero nos faltó concretar en la última jugada y definir. No ligamos la puntada final pero las llegadas fueron muy claras. Tuvimos el dominio pero no conseguimos el resultado", declaraciones de José Fernando Santa el 11 de noviembre del año anterior luego del empate 1 por 1 ante Deportes Tolima.
"Tenemos que definir cuando tengamos las opciones porque no lo estamos haciendo. Dominamos durante mucho tiempo pero sin eficiencia ni contundencia. Nacional vende cara su derrota", declaraciones de Luis Fernando Suárez el 18 de febrero luego de la derrota 3 por 0 ante Junior en Barranquilla.
¿En qué ha cambiado Nacional entonces? La misma retahíla de siempre... como se acota popularmente, "mucho tilín y nada de paletas." El problema sigue siendo el mismo, falta de seguridad porque un equipo que tenga convicción en su estilo y certidumbre en su juego, hubiera anotado por lo menos un gol en tres partidos.
"Creo que el funcionamiento que tuvimos durante los tres partidos no se ve reflejado en los resultados", añadió el técnico verdolaga.
Todos tiene responsabilidad en la crisis y todos son parte de la solución. Jugadores, cuerpo técnico, directivos, hinchas. No hay tiempo de lamentos. Es hora de replantear y volver a barajar ahora y no cuando no existan posibilidades de levantarse... es sabido que el momento más oscuro de la noche es el que antecede la salida del sol.
Juan Diego Ortiz Jiménez
Especial para FUTBOLRED