En la antesala del superclásico, que finalizó 1-1, el cuerpo técnico y la coach de Boca quisieron motivar al plantel. Para eso, pintaron las paredes del vestuario, colgaron carteles y pegaron afiches que animaran a sus jugadores. El problema que generó el malestar de River fue que la delegación se retiró del estadio Monumental sin limpiar los mensajes escritos con fibrón y sin descolgar las fotos.
(Vea aquí cómo quedó el vestuario visitante en el Monumental luego del 'Superclásico')
"Tenemos que asumir el error. Si bien todo sale con facilidad, debimos dejar el vestuario el condiciones. Seguramente, por la política que tiene, el club se hará cargo de los gastos que ocasione la limpieza", reconoció Rodolfo Arruabarrena, entrenador xeneize, en diálogo con TyC Sports.
Información de Canchallena.com.ar
