En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de
terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística,
optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada
con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa
navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo
deshabilitarlas u obtener más información
aquí
PSG vs Olympique MarsellaFoto: Tomado de Twitter @psg_inside
Por:
Jenny Gámez
25 de enero 2021, 08:00 p. m.
"Grandes jugadores como Messi siempre estarán en la lista del PSG". Las palabras de Leonardo en el diario L'Equipe produjeron un tsunami en el mercado mundial: ¡si tienen para convencer a Messi, tienen para ganarlo todo!
Y es exactamente lo que tendría en mente el PSG, que ya trabaja sin vergüenza en el posible fichaje del argentino, a quien le cae de maravilla vivir en París.
Pero ojo que contratar a Messi tiene de largo y de ancho: pagarle un salario cercano a los 30 millones de euros por año, incluso si se ahorra el traspaso, que ya en el verano pasado fue impagable para Manchester City, exige ajustar todas las cuentas del club y esa tarea no es sencilla. Repasamos lo que quiere y lo que puede hacer PSG para que en el futuro no sea solo rey de Francia sino cumple su plan de 'conquistar el mundo'.
La puerta de entrada
"Estamos sentados en la gran mesa de los que están siguiendo de cerca este asunto. De hecho, todavía no estamos sentados en esa mesa, pero nuestra silla está reservada por si... Cuatro meses en fútbol son una eternidad, en especial en estos tiempos”, decía Leonardo en la ya citada entrevista en L'Equipe. No miente.
Después del célebre burofax, Messi se tomará cada segundo de aquí a junio, cuando vence su contrato, para salir ed manera definitiva de FC Barcelona sin que vuelva a parecer solo una pataleta. Y ese tiempo es oro para PSG.
Las relaciones del club con FC Barcelona no son precisamente fluidas tras la tormentosa salida de Neymar en 2017 y el frustrado regreso dos años después. Por eso esta vez la operación tiene que ser limpia, hay que sacar al menos a un peso pesado de la nómina y hay que construir un proyecto que sea atractivo para el zurdo, que de otra manera podría elegir quedarse en el clubc atalán.
Ya el fichaje de Mauricio Pochettino, su compatriota, fue un primer paso. Pero no sería el único argentino: trabajan, según se dice, en renovar a Ángel Di María a toda costa (y a cualquier precio) y en convencer a Sergio Agüero, el compadre, de no renovar con el City (el contrato termina en junio) y mudarse a París. Y claro, que no se vaya Neymar, el primero que habló de la operación hace un par de meses, se da por descontado.
Se habla también de Eric García, un 'objeto de deseo' del FC Barcelona, y de otros dos nombres rutilantes: Dele Alli, el rechazado por Mourinho en Tottenham, y Eriksen, el ninguneado por Conte en Inter de Milán. Si resultara cierto y no solo un mecanismo de presión para negociar la renovación, la posible llegada de Sergio Ramos sería el moño del regalo.
La puerta de salida
Pero no habrá llegadas sin salidas y en ese punto el primero en la puerta es nada menos que Kylian Mbappé.
El chico, que tiene tremendo carácter, ya dijo en su última rueda de prensa, palabras más, palabras menos: o PSG pone un proyecto atractivo sobre la mesa para ganar el Balón de Oro, Champions y todas las copitas locales, o Real Madrid se pone serio por fin y le hace una oferta concreta que al menos se acerque a lo que hoy le pagan los cataríes o... ustedes verán... levanto el teléfono y habló con Klopp y con Liverpool.
El salario de 18 millones de euros que se ahorrarían con el joven campeón mundial y la cláusula de más de 200 millones del futbolista más valioso del momento, valen la pena el desprendimiento para PSG. ¿Alguien lo pagará en tiempos de pandemia? Ahí está el freno de mano de la operación.
El Madrid, por ejemplo, tiene un lío de 570 millones de euros que pidió para la reforma de su estadio, que ya empezó pero se tardará otro par de años. Según el diario AS de España, ya gastó 100 millones de ese préstamo y en junio tomará otros 270. Si se suma que para pagar habrá que contar con la reducción hasta los 617 millones de euros en ingresos y que a la plantilla se la ha exigido hasta 100 millones en reducción de salarios, habrá todavía más pérdidas y Mbappé podría ser un lujo inabordable.
Por eso PSG trabaja en otros pequeños pero significativos ahorros: Leandro Paredes y Julien Drexler estarían en la línea de salida no tanto por masa salarial sino por altas cláusulas de salida. El sueño de una plantilla ultraganadora exige todos los sacrificios...