En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de
terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística,
optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada
con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa
navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo
deshabilitarlas u obtener más información
aquí
Millonarios regresó al liderato. El triunfo sufrido, al minuto 92, cambió lo que parecía un pálido empate. Compromiso marcado por los fallos en los pases, de parte y parte.
Junior entendió el mensaje y reguló cargas, no podían ir al ataque, pese a la nómina rica en opciones. Además, no contó al 100% de condiciones con González y Borja, que recién llegaron en la madrugada del miércoles, luego de sus respectivas convocatorias a las Eliminatorias, con Venezuela y Colombia.
Puntos para destacar y analizar, desde el trámite, de embajadores y barranquilleros.
Insistencia hasta el final: los azules no bajaron la intensidad en los 94 minutos. La iniciativa siempre la tuvo de ir al ataque, regulando las cargas y sin entrar en la desesperación. El tiro de esquina, sobre el final del partido, es la muestra ideal de lo que Gamero buscó, además, de tener una alternativa, como la pelota quieta.
Junior pudo avanzar más en ciertos pasajes: el planteamiento buscó conservar el equilibrio en las zonas de atrás, donde lograron cerrarse y evitar pocas llegadas de Millonarios. Al salir en ataque, las bandas fueron fundamentales, pero al intentar regular cargas y evitar el desgaste de sus jugadores, perdieron esa picardía para hacer daño al rival.
La entrada de Borja significó bastante. Su peso en la cancha es evidente, logró ganar los duelos con Llinás, además, de trabajar para su equipo en el sector defensivo.
Zona izquierda, poco se explotó: por pasajes del partido, Perlaza bajó a la zona de finalización, para ser una alternativa al momento de descargar. La buena labor de la mitad del campo del Junior, complicó que los volantes centrales azules cambiaran de frente, para llegar a aprovechar esos espacios. Además, Junior se recostaba al sector derecho, en su gran mayoría, permitiendo el espacio para llegar por esa zona.
Duelo de equivocaciones de lado y lado: el estado de la cancha no fue el mejor, la lluvia no permitió a uno u otro tener la posesión al piso y ser certeros en ellos. Muchos errores, más de Millonarios, al realizar los toques, donde los de Gamero perdieron en varias ocasiones la posesión del balón.
Solidez defensiva en Millonarios: Álvaro Montero y la zona defensiva, se han vuelto en una muralla inexpugnable para los equipos rivales. Si no son los centrales, es el portero. Ya son 10 vallas invictas en todo el certamen. Los azules son el equipo con menos goles marcados, siendo apenas vulnerada su red en cuatro ocasiones, en comparación con los otros 19 clubes de la Liga, que ya han recibido de 10 goles en adelante.