Una etapa 13 impredecible espera a los favoritos en el Giro de Italia

Este viernes 23 de mayo el pelotón del Giro de Italia 2025 se enfrentará a una jornada que aparenta tranquilidad en el papel, pero que guarda trampas en su segunda mitad. La etapa 13 comienza sobre terreno plano, ideal para rodadores, pero cambia de tono con el paso de los kilómetros.

A excepción de una breve subida del Passo Roverello en los Colli Euganei, los primeros kilómetros no presentan mayores dificultades. Sin embargo, desde el kilómetro 60 todo cambia con la entrada a los Monti Berici.

Ahí, los corredores afrontarán constantes repechos y la subida de San Giovanni in Monte. Será un tramo incómodo, con desgaste acumulado que podría afectar en los kilómetros finales.

Ya sobre el cierre, la carrera se define en un circuito con la subida de Arcugnano, que sirve de antesala al ascenso final. El remate es en el Santuario di Monte Berico, con una pendiente media del 7,1%, pero con tramos exigentes: la última parte alrededor del 10% y picos de hasta el 12%.

Todo está dado para que los corredores explosivos aprovechen. El terreno permite ataques y sorpresas, justo en una etapa que puede parecer de transición, pero que podría tener consecuencias en la clasificación.