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Un crimen pasional, que tuvo como gran protagonista a un futbolista, sacudió a Italia y este martes finalmente se ha dictado una sentencia.
El tribunal de Bolonia declaró culpable de homicidio al futbolista Giovanni Padovani, quien fue condenado a cadena perpetua por atacar brutalmente a su exnovia, la modelo Alessandra Metteuzzi.
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En el relato de la prensa local se describe de manera aterradora la manera como el jugador del equipo Sancataldese, de la Serie D, acabó con la vida de la mujer: “la hirió asestándole patadas, puñetazos y golpeándola con un martillo, luego con un bate de béisbol y finalmente con un banco que sacó de un jardín cercano al lugar de los hechos”.
Según informó Marca de España, “las acciones fueron en la puerta de su casa y por las que el futbolista tendrá que cumplir condena perpetua, además de pagar una indemnización a los familiares de la víctima que ya lo había denunciado por acoso semanas atrás”.
Dice el medio español que “uno de los testimonios fundamentales en el caso ha sido el de un investigador que había intentado demostrar la obsesión del exfutbolista y modelo en 2021. Fue el mismo investigador, después de enterarse del brutal asesinato de la expareja, el que se puso en contacto con la policía, denunciando algunas peticiones "obsesivas", "que a veces rozaban el absurdo".
En el juicio se acosó al deportista y modelo de homicidio agravado por premeditación, acoso, motivos frívolos y vínculo afectivo. De hecho, el testigo relató que "Desde el principio me llamó la atención que con mucha insistencia, entre 10 y 15 veces al día, incluso de noche, esperaba tener información en tiempo real sobre los movimientos de Matteuzzi" para tener "confirmación de la información que ella le dio por teléfono".