Ha sido, como dice él, un viaje en el tiempo de regreso a su infancia, a donde comenzó su sueño de ser futbolista.
Neymar se dejó querer de Santos FC, su primer amor con la pelota, y volvió en medio de la euforia total de los brasileños, los que son seguidores del club y los que no. La misión, al final, es recuperar a Neymar para Brasil, simplemente eso.
Sus imágenes conmueven, su historia de vuelta a donde siempre fue feliz:
Se fue tan joven a FC Barcelona que algunos ni recuerdan cómo era verlo jugar siendo casi un niño:
¿ A qué volvió?
Neymar ganaba 100 millones de euros por año en Al Hilal de Aranbia Saudita, que pagó 90 millones al PSG por sus servicios y solo lo vio jugar 7 partidos.
Ahora, según Sport, el descenso de sus ingresos es abismal: "En el Al Hilal, Neymar percibía un salario con acuerdos comerciales de casi 3 millones de euros por semana, mientras que en el Santos cobrará unos 38.000 euros semanales, es decir, poco más del 1% de lo que ganaba en Arabia Saudí".
A nadie le importa. ya tiene muchísimo más dinero que el que quería o necesitaba. No se trata de eso. “Espero que estén todos conmigo en este próximo paso de mi vida. Estoy agradecido por todo su apoyo, incluso en mis momentos más difíciles. Y hubo muchos de ellos. Jugar al fútbol, hacer lo que más amo en mi vida, es lo que me hace feliz”, dijo el estelar atacante en el regreso a casa.
Y sí, se trata de una misión nacional que es hacerlo feliz otra vez, recuperar su sonrisa, su motivación, las cadenas de oración que sean necesarias para que su cuerpo obedezca las instrucciones de su fabulosa mente y el país vuelva a soñar con verlo en las canchas consolidado, listo para el Mundial 2026, el objetivo de todos.
El 10 falló en sus anteriores intentos, el que más dolió en Catar 2022 con un equipo que parecía soñado. Pero el de Estados Unidos tiene que ser su revancha y eso es, más que nunca, un objetivo de interés nacional, más en una Eliminatoria en la que no lo han pasado tan bien los suyos. Falta su chispa, su talento, su experiencia, su espíritu.
Su regreso se suma al de otras figuras que brillaron junto a él con la selección nacional, todos sumando para potenciar el fútbol loca, el Brasileirao, y brillar en el escenario continental. A eso apunta Ney, a quien su país se ha rendido.
Incluso en modo rockstar apareció el estelar jugador, en helicóptero, en su regreso al club de su niñez. 'El príncipe está en casa', dijeron. Y él se lo creyó:
Una vez en casa, con los suyos, el estadio rugió 'Neymar, Neymar' y él solo se dejó querer y lloró como un niño... uno como el que hace tantos años se fue y hoy ha vuelto a casa: