“Los hermanos sean unidos”, una frase que es tan antigua como el tiempo. Sin embargo, en la casa de los Aguilar, Felipe y Juan José dividirán el sentimiento por 90 minutos, cuando este sábado, Atlético Nacional e Independiente Medellín midan fuerzas en el clásico antioqueño 231, por la fecha 14 en la Liga II-2021.
En su segunda convocatoria con el poderoso, Juan José, el más joven de los hermanos espera hacer su debut en el fútbol profesional colombiano. Ya le cortaron el pelo, antes de cumplir sus 21 años el pasado 10 de octubre. Finalmente, no pudo jugar contra Envigado y la posibilidad de sumar minutos estaría en el duelo regional, contra el equipo de su hermano mayor Felipe y en la que alcanzaron a compartir algunos años. (Juan José hizo parte de las divisiones menores de Nacional).
Felipe, con una carrera más curtida, campeón de la Copa Libertadores y con experiencia en Brasil, regresa a disputar un clásico tras tres años. El zaguero ya es uno de los veteranos de Nacional y, como en su casa, la misión es guiar a los más jóvenes a consolidarse en el primer equipo como lo logró. Además de ayudarle al técnico Alejandro Restrepo y los otros compañeros veteranos en poner a andar un equipo que viene pasando un gran momento.
Citando las palabras de Aguilar a su llegada este semestre con Nacional, Felipe manifestó ese deseo familiar; "Es el sueño de mi hermano y el mío, de que nos podamos encontrar compitiendo en el fútbol profesional y Dios quiera que se dé la oportunidad, sería algo muy importante para nosotros dos". Quizás fue el destino o la casualidad que se encuentren frente a frente, una dualidad para la familia que es nacionalista por excelencia, pero que por 90 minutos el corazón estará dividido.
Este viernes, previo a la concentración de ambos, Felipe y Juan José le festejaron el cumpleaños a su madre. Nunca sabremos el deseo de la señora, pero intuimos que ese deseo de competir juntos en una cancha pueda plasmarse en un escenario ideal, donde 33.500 gargantas estarán alentando a los verdes y a los rojos.
La certeza que hay es que ambos se van a divertir, seguramente habrá un pacto de silencio hasta que termine el partido, logren nuevamente ese abrazo de hermandad y compartan todo, como lo han hecho siempre. Sumado a que ya están en la historia, como una de las seis parejas de jugadores y una de entrenadores cuyas familias tuvieron a un hermano en cada equipo grande del fútbol antioqueño.
Para recordar, los otros fueron: Rafael y Alfonso Serna en la década de los 40’s, Conrado y Jairo Arboleda en los 50’s, Esteban y Elkin Velásquez en los 60’s, Gabriel Jaime ‘Barrabás’ y Hernán Darío Gómez en los 70’s, Jimmy y Javier Arango en los 80’s y ahora en la segunda década de los años 2000 están Felipe y Juan José Aguilar.
Juan Camilo Álvarez Serrano
Corresponsal FUTBOLRED
Medellín
En Twitter: @juanchoserran8
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