Atlético Bucaramanga eliminó a Millonarios en octavos de final de la Copa Betplay 2024, en una llave muy pareja que se definió en penaltis.
Mientras Alberto Gamero, DT del azul, atribuyó a Dios esa instancia definitiva, para su colega Rafael Dudamel todo tuvo que ver con talento y trabajo.
El venezolano, para empezar, no se sintió nunca dominado: “fuimos completamente superiores en la primera parte. Nos llegó el golpe anímico en la primera jugada de la segunda parte con el gol de Millonarios. Te puede engañar y decir que en el segundo tiempo fueron superiores a nosotros. Reconocemos que fue fuerte el empate y esa es la lección, cómo mantener ese equilibrio emocional todo el partido y forma parte de la dinámica de la competencia”.
Pero después su clave estuvo en la figura de Aldair Quintana: “el trabajar permanentemente el cobro de penales nos da esa tranquilidad y personalidad para manejar esos momentos emocionales con naturalidad. Cuando tú preguntas con quién cuento y todos levantan la mano es una demostración de la confianza”.
Dudamel, que fue arquero, no duda: “tenemos un plus al tener al mejor arquero de la Liga BetPlay. Sabíamos que, en algún momento, uno iba a atajar y atajó dos. Eso te da mucha confianza. El partido fue muy emotivo como deben ser estos partidos con equipos históricos”.