El fútbol se reivindica todos los días de tanto espectáculo, tanta violencia, tantos lunares que abundan en distintas torneos.
Esta vez el escenario fue la novena división de la Liga de Federación de Entre Ríos, en Argentina. Los invitados eran niños, deseosos de mostrarse en la cancha ante sus amigos y familiares.
A la hora de registrar un cambio, una mujer que está en la línea le avisa al árbitro Mario Benítez que el chico que acaba de ingresar tiene los guayos rotos.
Antes que parar el cambio o no permitir la entrada del jugador, el ejemplar acto del juez es quitarse sus guayos y prestárselos al niño:
Un chico de la 9° División de la Liga de Federación en Entre Ríos tenía los botines rotos y el juez Mario Benítez le dio los suyos. 📹 adnfederacion pic.twitter.com/NV8imeKzNB
— TyC Sports (@TyCSports) August 27, 2019