Dani Alves no saldrá de prisión hasta que no se emita un fallo sobre su culpabilidad o inocencia sobre el presunto caso de abuso sexual del que fue acusado en enero pasado.
Así lo decidió la Audiencia de Barcelona, que respondió a la solicitud de su defensa sobre la necesidad de su salida de la cárcel en la que lleva seis meses, debido a la situación de sus hijos en la ciudad.
"Desestimamos el recurso de apelación interpuesto por la representación procesal de Daniel Alves da Silva", fue el fallo de la justicia este lunes, un nuevo golpe al brasileño, quien sigue a la espera de una fecha para la realización del juicio.
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Es el segundo fallo adverso, después del de febrero pasado, en su intención de salir del sitio de reclusión donde está, según dicen sus allegados, al borde de la desesperadción.
El argumento de los magistrados de la Audiencia de Barcelona es que "los indicios de criminalidad que en su día valoramos como suficientes para imputarle el hecho y como fundamento de la medida cautelar permanecen inalterables", según el fallo.
"El riesgo de fuga permanece y sigue fundado en los motivos que ya expusimos y a los que forzosamente debemos remitirnos. Consideramos que ninguna otra medida cautelar puede neutralizar con suficientes garantías dicho riesgo", concluye.