La imagen le está dando la vuelta al mundo. Francisco Argüello, de Oriente Petrolero, se disponía a patear el balón hacia el arco del Deportes Tolima en el duelo de vuelta por la segunda fase de la Copa Suramericana, pero John Hurtado entra con la pierna fuerte para intimidar y la pierna del jugador del equipo boliviano, cual si fuera de caucho, se va hacia atrás.
El diagnóstico médico fue fractura de tibia y peroné, pero lo que ha causado escándalo en Suramérica es que el árbitro venezolano Juan Soto apenas amonestó al volante del Tolima.
Hurtado se mostró hoy apesadumbrado por la situación de Argüello y trató de explicar la jugada: "Yo nunca había visto una jugada así. No soy un jugador malintencionado, soy un jugador que entra a disputar la pelota. La intención era trabarlo para que no le pegara al arco y desafortunadamente ahí pasa la fractura", dijo a los micrófonos de Antena 2.
Para el jugador de los ibaguereños la lesión de Argüello es algo doloroso porque "es un compañero del fútbol, un compañero que vive de esto, y es lamentable".
El técnico Hernán Torres se apresuró a sustituir a Hurtado tras la jugada, ocurrida en el minuto 34 de juego, pues el volante quedó evidentemente impresionado. "Después de eso yo no quería saber nada del partido. Para uno en su carrera futbolística esto es muy bravo", admitió el jugador.
Tolima, con su victoria 2-0 sobre Oriente Petrolero, clasificó a los octavos de final de la Copa Suramericana en donde se medirá con Banfield de Argentina.