La LPF también castigó con una multa de 70.000 euros a Penescu, al presidente y al administrador de la entidad rumana, cargos que ocupan, respectivamente, Daniel Minca y Gheorghita Pieca.
Asimismo, los tres directivos, que tienen cinco días para apelar la decisión, fueron apartados de las instancias del mundo del fútbol en las que participaban en calidad de respresentantes del club rumano.
Si tras la eventual apelación se confirma el castigo, el FC Arges, que terminó la temporada 2008-2009 en décima posición, perdería la categoría en beneficio del Gaz Metan Medias.
Detenido el pasado mes de abril, Penescu está acusado de haber pagado decenas de miles de euros en 2008 a árbitros y a otros representantes del fútbol del país del este europeo para que su equipo obtuviese arbitrajes favorables.
Además de Penescu, otras nueve personas están inculpadas en esta trama de corrupción, entre quienes destacan el ex futbolista internacional rumano y ex presidente de la Federación Rumana de Fútbol Florin Prunea y cinco árbitros.
Bucarest
AFP
