España, número uno del ránking Fifa y campeona europea, que llega con un récord de 32 partidos invicto, parece el gran candidato a la corona, por lo que no deberá tener problemas para terminar como primero del Grupo A, en una llave que completan Nueva Zelanda, Irak y Sudáfrica.
Brasil, que se ha hecho con el primer puesto en el grupo sudamericano de las eliminatorias al Mundial-2010, tras vencer en pocos día a Uruguay (4-0) y Paraguay (2-1), es el otro favorito al título, aunque su Grupo B será más complicado ya que enfrente a Italia, Estados Unidos y Egipto.
La primera fase no parece complicada para España y Brasil y todo parece indicar que deben hacerse con una de las dos plazas de sus grupos que dan acceso a semifinales, mientras que Italia, presente en la competición como campeón mundial, tiene más cara su clasificación.
El envejecido equipo italiano sólo pudo ganar por 4-3 a Nueva Zelanda el miércoles y sus rivales en el grupo, Egipto, bicampeón africano, y el ascendente Estados Unidos pueden complicar el pase a semifinales de los 'azzurri'.
El segundo billete del Grupo A, acompañando a España, debería ser para Sudáfrica, lo que sería bueno para la competición debido al colorido que darían a los aficionados de los Bafana-Bafana a sus encuentros.
Tanto España, que quiere su primer título de la Copa de las Confederaciones, como Brasil, que busca su tercer trofeo, son conscientes de que parten como favoritos, y así lo asumen sus jugadores.
"Así como en otros torneos se nos colocaba la etiqueta de favoritos y creo que no correspondía a la realidad, ahora sí nos sentimos favoritos. Por primera vez venimos con esa idea y queremos hacer algo grande como ganar esta Confederaciones", afirma el capitán español, Iker Casillas.
Lucio, el capitán verdeamarelo, como miembro de la selección pentacampeona del mundo sabe que sólo la victoria les vale a sus aficionados.
Se confirma que llegan con ánimo para afrontar la Copa Confederaciones. "Vamos a luchar por el título, ésa es nuestra meta. Tenemos que respetar a todos los equipos pero nuestro objetivo principal es ganar el torneo", aseguró el Lucio.
Más allá del aspecto deportivo, la Copa de las Confederaciones representa un test para saber si los sudafricanos están preparados para organizar la Copa del Mundo dentro de un año.
Cuatro estadios, los de las ciudades de Johannesburgo, Rustenburgo, Pretoria y Bloemfontein, los que ya están preparados para el Mundial, serán las sedes del torneo.
Las entradas para los partidos de la Copa de las Confederaciones están vendidas en un 70% y los organizadores esperan que se cuelgue el cartel de "no hay billetes" en casi todos los encuentros.
Aunque Joseph Blatter, presidente de la Fifa y defensor a ultranza del Mundial sudafricano, y Danny Jordaan, responsable del comité organizador, lo que esperan sobre todo es que no haya ningún incidente a nivel seguridad.
Con uno de los índices de criminalidad mayores del mundo (18.000 homicidios y 200.000 violaciones denunciadas al año), la Copa de las Confederaciones podría crear temores de cara al Mundial, donde habrá una mayor afluencia de visitantes, en caso de problemas.
Debido a ello, 10.000 policías y casi 2.000 agentes de seguridad privada velarán por un desarrollo limpio en términos de criminalidad durante el torneo.
"Finalmente ha llegado la hora de abrir el telón. Ha llegado la hora de cerciorarse de que el país puede conseguirlo y de que va a conseguirlo. Por eso, un año antes del gran certamen, esta Copa Confederaciones resulta crucial", afirma Blatter.
El 28 de junio, tras una hipotética final España-Brasil, echará a andar la cuenta atrás al Mundial-2010.
AFP
