El partido 100 del Tigre: ganas y poco más en regreso a la Selección

Una mirada al cielo para dedicar un récord más: 100 partidos en Selección Colombia. Así arrancó para Falcao el amistoso contra Guatemala.

Una vez se juntó con James a los 4 minutos pero a tiempo lo desarmaron en el área y un par más apareció por la banda izquierda, recuperando y buscando socios, motivado como nunca, como siempre que se viste de amarillo.

Un socio le aparecía a los 13 minutos, Matheus Uribe, pero otra vez se le escapaba la pelota antes de castigar.

Había sobrepoblación de hombres en el área centroamericana, y era difícil para él mostrarse con claridad para los pases de James o Cuadrado.

Una oportunidad tuvo en esa sociedad que tantas alegrías dio en el pasado: James lo ubicó y le puso una pelota que le anticipó un zaguero. Una vez más la tuvo y remató desde el suelo, casi cayendo, pero no tuvo la suficiente puntería. Y en el intermedio mucho de ese sacrificio tan suyo, pero pocos socios que le pusieran pelotas limpias adelante. 

Esta vez Falcao tuvo pocos espacios y eso se notó en los 45 minutos que el dio Lorenzo. Es lo que tenía para ofrecer, pensando incluso en el segundo partido contra México. Está bien, sano y motivado. Pero es claro que cuando Durán, Santos Borré y la sangre nueva llega, su turno ya no es el primero.