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El siempre polémico entrenador del Liverpool, Jurgen Klopp, no pasó inadvertido tras el luchado triunfo que logró contra Tottenham.
Tras firmar un duelo pleno de intensidad, Liverpool se impuso por 2-1, con autogol y en tiempo de descuento. Pero no por eso, según el DT, cambia el dulce sabor de la victoria.
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"Les dije a los chicos que hay 500 caminos para ganar un partido y hoy fue algo feo pero... ¿A quién le importa?", dijo el alemán.
Klopp añadió que "en la primera mitad hubo grandes ocasiones y marcamos un buen gol, luego estuvimos más pesados. El Tottenham cambió y nosotros no pudimos adaptarnos", añadió
El triunfo, sufrido y "feo", como dijo Klopp, representa para el Liverpool la suma de 79 unidades, dos más que Manchester City (un partido menos) y, a seis fechas del final de la Premier League, un paso más hacia un título esquivo desde 1990. Es más: ya son 37 partidos sin perder en Anfield, una auténtica fortaleza para los rojos.
Salah resumía bien lo que sienten Liverpool y su gente a esta altura del torneo: "Ellos realmente quieren ganar la Premier League y nosoros lo haremos todo para que eso pase". En ese sentido, sí tiene mucha razón Klopp: ¿A quién le importa?