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Millonarios empató este jueves con Deportivo Cali en Palmaseca. Los dirigidos por Alberto Gamero se pusieron al día en Liga y mostraron diferentes caras a lo largo del duelo.
Si bien se mejoraron aspectos en defensa, zona que más sufrió en el inicio del campeonato, y ataque, todavía hay mucho por mejorar en cuanto a orden e intensidad a lo largo de los 90 minutos.
Poderío ofensivo: El conjunto embajador creó muchísimas opciones de gol, antes del empate, que no pudieron ser concretadas por Cristian Arango en tres claras oportunidades. A falta de juego interior (por la salida de Mackalister), Millonarios usó muy bien las bandas y la entrada del juvenil Rengifo ayudó a refrescar el equipo.
Seguridad en el arco: Christian Vargas se sobrepuso a las criticas y fue una de las grandes figuras del equipo. Salvó en tres oportunidades claras, estuvo seguro y mostró que tiene condiciones para tener un buen desempeño en el arco.
A mejorar
Orden defensivo: Si bien hubo mejoría con la inclusión de Matías de Los Santos, los movimientos con Juan Pablo Vargas deben acoplarse más. Por momentos salían ambos y dejaban grandes vacíos que aprovechó el Cali con pases al vacío. Por las bandas, Berte no tuvo suficiente respaldo y por ello en los primeros minutos todos los ataques fueron por allí.
Intensidad: Es evidente la falta de fútbol debido a la pandemia, pero por varios momentos se vio un Millonarios excesivamente lento. El desfase entre líneas fue notorio, situación que cambió en cierto sentido con Stiven Vega, La defensa se afianzó, pero el ataque quedó relegado. Godoy, Arango y Del Valle tuvieron que arreglárselas en soledad, y lo hicieron, por largos periodos.