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Colombia vs Paraguay - Copa América 2024Foto: Logan Riely / AFP
Por:
Jenny Gámez
05 de julio 2024, 10:36 p. m.
La Selección Colombia tiene el reto tremendo de pasar de ser un favorito habitual a dar el golpe sobre la mesa y apuntar a la final y al título de la Copa América 2024.
Siempre se reconoce su talento, su potencia, sus muchas alternativas, pero tantas veces quedó en el camino con todas esas fortalezas que esta vez parece casi imperdonable que pueda fallar este sábado, contra Panamá, en los cuartos de final del torneo que debe marcar el regreso a la pelea por los títulos.
Un invicto de 26 partidos puede que para algunos no diga tanto y no sea tan determinante, pero sí que da una idea clara de lo que tiene el técnico Néstor Lorenzo entre manos: un equipo solvente, que tiene muchas maneras de salir de los problemas gracias a la calidad individual de la que dispone y que está tan convencido de que puede dar ese paso a los triunfos, a uno que ha esperado por 23 años como el de la segunda Copa América de su historia.
Pelota quieta, la vía
Y ahora que enfrenta a un equipo complicado como esta Panamá, que se dio el lujo de herir casi de muerte al anfitrión Estados Unidos en el grupo C y pasó muy por arriba de Bolivia, es momento de hacer ese peso específico de tener estrellas en distintas posiciones y asegurar, sin excesos sino con contundencia, el acceso a la semifinal.
Richard Ríos y Luis DíazFoto: Tomado de X @CopaAmerica
Sobre la mesa, una estrategia que se ha convertido en indescifrable en este ciclo de Lorenzo: la pelota quieta. Colombia es soberana gracias a la impactante precisión de los cobros de un James Rodríguez que es figura excluyente de Colombia y de la Copa, pero también a la multiplicidad de rematadores que encuentra: Jhon Córdoba como referente de área, pero también Dávinson Sánchez, Lerma, Ríos, Díaz, hasta Muñoz llegando a posición de remate para finalizar esas jugadas conforman una baraja tan amplia que es difícil repartir marcas de manera eficiente y anticipar a quién convertirá al final.
En el banquillo, por las dudas, esperan otros cobradores excelsos como Juan Fernando Quintero, Jorge Carrascal o incluso Yaser Asprilla, con finalizadores como Durán o el propio Borja, que aún no ha tenido minutos. Opciones hay. Y por soberbio que suene, a veces parece que sobran.
El equipo nacional ha ganado prestigio en esta Copa América gracias a ese potencia en el juego aéreo que es nuevo y poco a poco se convierte en un sello, reconocible para todos. y cuando falla, la media distanciad e un Jhon Arias, el propio Díaz, James Por supuesto, Ríos que es potencia pura y el defensor goleador Muñoz aportan mucha variedad al ataque. Por ahí hay que agredir a Panamá, respetándolo a lo equipo grande: goleando si es posible, jugando con seriedad, sin adornos ni excesos, y siendo contundente antes que espectacular. El que es mejor lo tiene que demostrar en el campo. Y Colombia debe creerse que lo es.