Tal como lo anunció en la rueda de prensa antes del partido Japón-Colombia, Carlos Queiroz no hizo grandes cambios respecto a lo que dejó su antecesor, José Pékerman.
El entrenador portugués sí dio su toque desde la alineación inicial, pero, a grandes rasgos, el equipo no tuvo grandes variaciones. Esto es lo que se mantuvo y lo que cambió en este primer juego.
El sistema de juego no tuvo variaciones: en la última era, el argentino optó por un esquema de 4-2-3-1 que también mandó al campo esta vez Queiroz. El poco tiempo de juego no le permitió al portugués probar nuevos sistemas, aunque supo aprovechar el tiempo para elegir a quienes creyó podían darle forma a su idea.
Una columna vertebral: Dávinson Sánchez, Yerry Mina, Wilmar Barrios, James Rodríguez, Luis Muriel y Falcao García son los hombres que se mantienen en la titular de la administración anterior y ninguno cambió de posición.
En el doble cinco del mediocampo, Mateus Uribe, el hombre de la zona con más vocación ofensiva, fue dejado en el banco de suplentes y Queiroz optó por un equipo más defensivo con Jefferson Lerma. Aunque los dos estuvieron en el Mundial con Pékerman, Uribe ha tenido más tiempo en la Tricolor que Lerma.
De los laterales izquierdos que tuvo Pékerman en su último tiempo no hay ninguno disponible. Así, la obligación de buscar uno está en Queiroz. Machado fue el elegido para este partido y es una de las novedades en este proceso.