No fue el partido de la contundencia, la exhibición, el repaso que iban a ver los hinchas en Anfield. Pero fueron tres puntos y eso, dadas las circunstancias, es suficiente.
Liverpool superó 1-0 a un Fulham durísimo, siempre amenazante, con Luis Díaz nuevamente entre los titulares pero con pocas opciones de gol en el arco rival.
La historia empezó como se preveía: furor puro de los rojos contra en predios de Leno, con llegadas por izquierda del colombiano, siempre ofreciéndose e intentando romper una barrera dificilísima que montó Fulham.
Intentaron Salah y Núñez antes de que el esfuerzo de ambos, justamente, diera resultado: el uruguayo provocó un penalti claro y el egipcio lo cambió por el 1-0, a los 39 minutos.
Una exhibición de Díaz en la recuperación, poniendo el cuerpo, exigiendo la rodilla-no sin generar temores en las gradas- y saliendo airoso del duelo provocó una ovación. Pero en el cierre se acercó más de la cuenta el visitante y dispuso de una opción que salvó en el mano a mano con Vinicius el fabuloso arquero Alisson Becker.
Y el complemento arrancó igual pero se cansaron pronto los dueños de casa, lo que les dio vida a los rápidos atacantes deun Fulham que tuvo dos opciones clarísimas de Carlos y Willian y al final James.
Por fortuna acabó el tiempo y ahora Liverpool es quinto, en zona de Europa League y parcialmente a 4 puntos de la zona Champions, el objetivo para salvar la temporada. Fulham es décimo con 45 unidades.