Un gran debate se originó en las últimas fechas por el mal estado de la cancha del estadio El Campín, que inclusive ha sido calificada por el técnico de Millonarios, Alberto Gamero, como un espacio donde no se puede jugar, tras la victoria 3-1 contra Peñarol por Copa Sudamericana.
Muchos señalaron los conciertos de los últimos meses como la causa principal del evidente desgaste de la gramilla, pero el Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD), que hace solo unos días había dicho que la cancha estaba en perfecto estado, encontró la real causa de los daños.
La entidad informó que la gramilla tuvo que someterse a pruebas de fitopatología y que las muestras analizadas en laboratorios de la Universidad Jorge Tadeo Lozano llegaron a una asombrosa explicación: se hallaron cuatro microorganismos cuyos nombres científicos son Fusarium sp. (hongo), Pseudomonas sp., Pratylenchus sp. (nemátodos) y Xanthomonas sp. (bacterias).
De esta última, se hallaron niveles por encima de los normales. Esto explicaría por qué se dañó la estética del campo deportivo, sobre todo el follaje de la grama poa, una de las dos que tiene el principal escenario deportivo de la ciudad.
Según informó El Tiempo, la Universidad Jorge Tadeo Lozano explicó que esta bacteria se desarrolló como resultado de fenómenos de temperatura y humedad presentados entre el 10 y el 17 de abril, especialmente un fenómeno denominado halo de sol.
Los cambios bruscos de temperatura en la capital los días 12, 13, 14 y 15 de abril y eso produjo incrementos de la transpiración en la planta con pérdida de agua y disminución de la fotosíntesis, así como disminución de la producción de azúcares y otras moléculas esenciales para la fisiología del cultivo. “Esto ocasionó un alto costo energético para la grama”, explicó el IDRD, que en todo caso destacó que, a pesar de lo difícil que luce el campo, se pueden desarrollar actividades deportivas sin ningún problema pues no se afectó la porosidad del campo.
Por ahora, según se explicó, se implementa un plan de choque que ya se probó el 8 de mayo pasado y que consiste en aireaciones, salado con arena, mejoradores de suelo, inhibidores biológicos y fertilizantes biológicos. Planes de remodelación de las tribunas, que presentan filtraciones de agua y otras fallas que no comprometen la seguridad, se seguirán adelantando en los próximos meses.