Después del empate 0-0 entre Independiente Santa Fe y Atlético Nacional, en duelo de la fecha 19 de la Liga II, se habló poco del fútbol expuesto por los dos equipos. Los comentarios se centraron en la descalificadora agresión de Javier López a Jhon Édison Mosquera.
En la entrada a los camerinos, se generó una pelea en la que tuvieron que intervenir integrantes de ambos elencos y miembros de la Policía. “Fue una bronca que ya tenían ellos dos. Lo del jugador de Santa Fe estuvo muy mal hecho: le pegó un puño y le hinchó el ojo”, expresó Sebastián Támara.
El delantero, quien ingresó en la etapa complementaria, aseguró que el fútbol es para jugarlo y disfrutarlo, no para realizar actos como el de López. Por otro lado, el atacante cucuteño manifestó que la igualdad fue buena, dadas las circunstancias.
“Nos vamos contentos porque tuvimos diez hombres desde el primer tiempo y tratamos de manejar eso. El empate es valioso porque nos deja en la punta”, afirmó Támara, quien continúa sumando minutos en el torneo local con el ‘verdolaga’.
Finalmente, el deportista de 20 años, contó que las instrucciones de Reinaldo Rueda fueron tener la pelota y juntarse con los volantes, pues con la posesión del balón la opción de anotar podría llegar: Cristian Dájome contó con la más clara y la desperdició. “La tuvimos y no la metimos”, concluyó Támara.
Redacción Futbolred
Sebastián Támara, juvenil de Atlético Nacional.
Foto: Cortesía Atlético Nacional