Deportivo Pasto perdió la gran final de la Liga I-2019 con el Junior por penaltis, después de ganar 1-0 en los 90 minutos y obligar a la definición desde el punto blanco. El equipo nariñense puede darse por bien servido, pues superó a grandes equipos y fue el sorpresivo finalista.
Los dirigidos por Alexis García tuvieron que superar muchas adversidades este semestre, incluso jugar en otro estadio todo el semestre, en Ipiales, y luego tener que improvisar su localía en la gran final por órdenes de la Dimayor.
Estas fueron las claves del Pasto en una campaña que es para aplaudir de pie:
* Fue un buen local. De 13 partidos en Ipiales, ganó 7, empató y solo perdió 1 (contra Once Caldas en la fecha 3). Incluso en Bogotá, en donde se vio obligado a jugar la final, ganó su partido sobre Junior.
* Encontró una nómina base. Le costó al técnico Alexis García, pues hubo lesiones y momentos de bajo nivel, pero luego pudo tener continuidad en el equipo inicialista. Tener un once base fortaleció las ideas que implantó el entrenador.
* Bien contra los grandes. Este semestre le ganó a Nacional en el Atanasio y al DIM en Ipiales; con Millonarios perdió uno de tres duelos, como le pasó con Junior; al América le ganó dos de tres enfrentamientos y a Santa Fe le empató.
* La motivación de Alexis. El entrenador siempre trató de promover un mensaje de confianza y positivismo en el grupo de jugadores y lo logró. A pesar de que tenía un plantel nuevo y nadie apostaba por llegar tan lejos, el técnico los convenció de lo contrario.
* Hambre de gloria. Justamente el equipo con más fichajes este semestre tuvo jugadores que llegaron libres y con sed de revancha. Ellos demostraron que querían volver a ser importantes en e fútbol colombiano y por eso realizaron un gran trabajo colectivo para volver a cotizarse individualmente.