El tenista Roger Federer ha invertido buena parte de su tiempo en cuarentena, por el coronavirus covid-19, en comunicarse con sus millones de seguidores en el mundo.
Su misión es hacer del encierro una buena excusa para acercarse al tenis. Y con lujo lo está logrando...
Esta vez su reto tiene que ver con un ejercicio básico, que en realidad es más difícil de hacer de lo que parece.
Si se atreve, corra a elegir su sombrero y ¡manos a la obra!
Si le hace falta un poco de inspiración, el mismo suizo se la regala... no importa el clima, no importa la nieve...