Con muy poco, Palmeiras va por el bicampeonato de Copa Libertadores

El Verdao sacó un empate a uno frente al Mineiro y disputará su segunda final consecutiva de Copa.

Abel Ferreira y Marcos Rocha

Abel Ferreira y Marcos Rocha en Pameiras.

Foto: EFE

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29 de septiembre 2021 , 12:00 a. m.

Este martes se decidió el primer finalista de la Copa Libertadores 2021. Luego de un aburrido empate a cero en la ida, Atlético Mineiro y Palmeiras definieron su llave en el Mineirao.

El nivel mejoró un poco respecto al primer enfrentamiento. Aunque las opciones de gol también escasearon, se vio una mentalidad diferente en ambos equipos: intensidad y lucha permanente. Tanto así que varios roces tuvieron que se manejados por el árbitro Wilmar Roldán.

El primer acercamiento del dueño casa llegó al cuarto de hora. Error en salida que aprovechó Eduardo Vargas para ganar en velocidad, eludió a su marcador y quiso jugar por dentro para que Hulk quedara mano a mano, pero su pase fue impreciso y el golero Weverton cortó a tiempo.

A la media hora, el turno fue para Palmeiras. Mariano falló en el juego aéreo, Danilo aprovechó para bajarla perfectamente por sector izquierdo, entrando al área recortó hacia dentro y con su pierna menos hábil quiso patear al palo lejano del arquero, pero su disparo se abrió. Clarísima para la visita.

Sobre el final llegarían las más claras del Mineiro. Primero (43') fue un pelotazo desde el fondo para aprovechar nuevamente la velocidad de Vargas. El chileno desparramo al defensor que lo perseguía, entró al área y sacó un derechazo potente al primer palo, pero Weverton le adivinó la intención y atajó sin problemas en dos tiempos.

Tres minutos después, ‘Nacho’ Fernandez le ganó un duelo a Felipe Melo, remató de inmediato con una volea cruzada y nuevamente el golero visitante dijo NO. Manotazo y tiro de esquina.

La segunda parte inició con la primera intervención de Hulk. El extremo ex-Porto hizo la de siempre: recibió al borde del área, se acomodó y soltó una bomba de pierna izquierda. Weverton, a quien la bola le picó antes, reaccionó de maravilla. El Verdao contestó inmediatamente después con un pase al vacío de Marcos Rocha, Roni ganó a potencia pura e intentó definir al palo de Everson, pero este último atajó en dos tiempos.

Y al 51' por fin se abrió la cuenta en el Mineirao, después de una gran jugada colectiva. Mariano habilitó a Jair por derecha, este mandó un centro pasado sobre la línea final y en el segundo palo apareció Vargas para anotar de cabeza. El estadio explotó de jubilo.

Cuatro minutos después, el chileno tiró una pared espectacular con ‘Nacho’ y no pudo definir ante la salida de Weverton, quien salvó con la punta de sus pies. El partido poco a poco prendía mecha.

A la hora de partido, Palmeiras por poco logra el empate gracias a un grosero error de Nathan Silva. El zaguero central dejó pasar un balón elevado, Rony, detrás suyo, controló para su sorpresa e intentó definir cruzado, pero el golero Everson, con un ligero roce, salvó milagrosamente a su equipo. 

Al minuto 67, el recién ingresado Gabriel Veron cambió la historia. No tenía 30 segundos en cancha y tras una galopada por izquierda, le ganó a puro lomo a Nathan. En la línea final alzó la cebeza, mandó un centro raso y en el área chica apareció Dudu para empujarla. Enmudeció el Mineirao con la paridad a uno.

Los últimos 20 fueron un solo del Mineiro. Mientras intentaba entrar por cualquier resquicio o intentar con la media distancia de Hulk, Palmeiras apeló al ‘Catenaccio’ puro: defender, defender y defender. Felipe Melo fue vital en la tarea.

Finalmente la defensa del Verdao fue impasable ante las arremetidas y el apoyo furibundo del estadio. Palmeiras, con muy poco, accedió a su segunda final consecutiva de Copa Libertadores. El sueño del bicampeonato está intacto.

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