Thomas Müller puede ser el campeón mundial de los políticamente incorrectos: cuando tiene un micrófono en frente no se corta, lo que está pensando pasa sin filtros y él parece disfrutarlo.
Este miércoles su equipo, Bayern Munich, eliminó a PSG de Champions League, un nuevo golpe al millonario proyecto francés que se da sobre la base de la disciplina férrea alemana.
Por eso Müller sacó pecho. El asunto es que lo hizo hablando de Lionel Messi, prácticamente un intocable, más después de coronarse campeón mundial: “Contra Messi, las cosas siempre van bien a todos los niveles en términos de resultados. A nivel de clubes, Cristiano Ronaldo era nuestro problema cuando estaba en el Real Madrid”, admitió.
“Tengo el mayor respeto por la actuación de Messi en la Copa del Mundo”, aclaró. Pero fue Troya. Muchos le recordaron que el argentino está en el tope mientras el portugués está en el ocaso, que Cristiano se irá del fútbol sin ser campeón del mundo, que la comparación es odiosa.. Pero es Müller con su honestidad brutal, así que no se desgasten, que lo último que le interesa es agradar.