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Portero brasileño habría sido también voleibolista
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Portero brasileño habría sido también voleibolista

El jugador del Wilstermann, ha sido protagonista por sus atajadas y antes por el voleibol.

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02 de abril 2011 , 02:05 p. m.

El guardameta brasileño Mauro Machado (36), que esta semana cosechó elogios pese a la goleada (3-0) sufrida por su equipo, el Wilstermann boliviano, a manos del Inter de Brasil, alternó sus inicios en el fútbol en La Paz con el voleibol para poder sobrevivir, mientras esperaba su oportunidad en la Liga.

Machado había jugado voleibol durante cinco años en Porto Alegre pero también se formó como portero en el Gremio Sportivo Continente, escuela que lo envió a Bolivia en 1999 como parte de un intercambio de jugadores con la academia boliviana Tahuichi Aguilera.

Machado, nacido en Porto Alegre el 22 de enero de 1975, llegó a Bolivia para probarse en la liga profesional de fútbol aunque primero recaló dos años en el Municipal de la segunda división que, sin embargo, le incumplió las promesas económicas que le hizo.

"Como jugaba voleibol en Brasil y lo hacía más o menos bien, la gente me llevaba a jugar a los barrios a cambio de que me pagaran el servicio de luz o los almuerzos", dijo hoy Machado a Efe, al recordar sus primeros momentos en Bolivia hace 12 años.

"Solo jugaba fútbol o voleibol para sobrevivir. Hubo un tiempo que pase hambre y frío, pero es el camino que uno tiene que recorrer antes de cualquier triunfo", sostuvo el guardameta que quería labrarse un lugar en Bolivia para ayudar a su "humilde familia" en Brasil.

Dos años después de esos sacrificios, Machado logró convencer en 2001 al modesto Mariscal Braun de la liga y comenzó a ganarse el respeto en el torneo boliviano en el que fue considerado ese año como uno de los tres mejores porteros en Bolivia, según recuerda.

Su desempeño le hizo dar un salto en 2002 al Bolívar, el equipo más laureado de Bolivia y que tuvo su mejor campaña internacional en la Copa Sudamericana 2004, con Machado en el arco jugando la final contra el Boca Juniors, que finalmente se llevó el campeonato. De ese torneo tiene su mejor recuerdo, pero también su peor momento.

En un partido, en la altura de La Paz, el Bolívar ganó por 4-2 a la Universidad de Chile, pero el arquero chileno Nicolás Peric le hizo a Machado un gol de arco a arco con un disparo de 85 metros.

"Cuando algo así pasa, siempre te enseña a seguir creciendo", dice Machado, que destaca sus valores cristianos como la fórmula que le permitió enfrentarse a la adversidad.

En Bolivia hizo toda su carrera profesional y ha logrado un subcampeonato en Copa Suramericana y cuatro títulos nacionales con el Bolívar y uno campeonato nacional con Real Potosí, aunque le gusta subrayar además un título nacional en voleibol con el club potosino Lupita que ganó mientras tenía vacaciones en el fútbol.

Machado ha sido elogiado porque, según ha destacado la prensa, sus reflejos felinos salvaron esta semana al Wilstermann de una paliza mayor ante el Internacional que, sin embargo, le hizo tres goles en Porto Alegre, en partido de Copa Libertadores de América.

EFE

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