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Llegada de Mourinho al Real Madrid, un nuevo intento para frenar al Barcelona
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Llegada de Mourinho al Real Madrid, un nuevo intento para frenar al Barcelona

Florentino Pérez al hablar de la salida de Manuel Pellegrini y la llegada del portugués, afirmó que su equipo tiene la necesidad de "un nuevo impulso"; y éste que tiene un nombre propio: Mourinho.

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26 de mayo 2010 , 12:22 p. m.

El técnico portugués José Mourinho, al que le gusta denominarse "The Special One", alabado por sus éxitos deportivos pero también criticado y objeto de polémica por sus gestos y declaraciones, es el "nuevo impulso" elegido por el Real Madrid para intentar llevar al equipo a la cima.

El entrenador portugués aún se tiene que desvincular del Inter de Milán, con el que tiene contrato hasta el 30 de junio de 2012, pero su llegada es inminente. Llega como triunfador: ha conquistado esta campaña la Liga de Campeones de Europa, el campeonato nacional italiano y la Copa de Italia. Tres de tres.

Pero, sobretodo, para el madridismo llega como el principal artífice de que el "eterno rival" Barcelona no haya estado el pasado sábado en el Santiago Bernabéu pugnando en la final con el Bayern Munich por la Liga de Campeones. Y eso, para el actual sentir del Real Madrid, es mucho, casi un título.

Los títulos adornan la carrera de Mourinho como técnico: ha ganado las ligas nacionales en Portugal (Oporto), Inglaterra (Chelsea) e Italia (Inter de Milán), dos veces en cada ocasión; dos Ligas de Campeones de Europa (Oporto 2004, Inter de Milán 2010) y una Copa de la UEFA (Oporto 2003).

A ello se unen, entre otros trofeos, una Copa y dos Supercopas de Portugal; una Copa y dos Copas de la Liga Inglesas; una Copa y una Supercopa de Italia.

Un palmarés envidiable a sus 47 años (Setubal, 26-01-1963) y fruto de una gran pasión por el banquillo que le viene desde muy joven. Su padre ya le encargaba espiar a los rivales cuando entrenaba al Os Belenses, equipo del que había sido guardameta. Su abuelo, además, fue presidente del Vitoria de Setubal.

Pronto Mourinho aprendió método, norma y estudio del rival; como saber sacar provecho de lo que uno tiene y como contrarrestar lo que tiene el rival. Fue inteligente al saber que su futuro en el fútbol no estaba como jugador, sino como líder de grupo.

Se licenció en Educación Física (especialidad en Metodología en Deportes), mientras empezaba a hacer sus pinitos como técnico.

Realizó en Escocia el curso de director técnico de fútbol de la Uefa, mientras estudiaba el fútbol inglés. Y, luego, se convirtió en entrenador en una escuela secundaria de Portugal.

Trabajó en divisiones inferiores, fue aprendiendo en método y estudio, en formación personal y en trato de grupo. Pronto le llegó un paso vital para su carrera, cuando se convirtió en asistente-ayudante del entrenador inglés Bobby Robson, quien marcó su futuro.

Estuvieron juntos en el Sporting y en el Oporto, ayudándole en funciones técnicas y también, ante su buen dominio de varios idiomas, como traductor en conferencias de prensa.

Robson le llevó al Barcelona como tercer técnico, pero también Mourinho le ayudó como traductor en los primeros meses. Tras la marcha de Robson, se quedó como ayudante del holandés Louis Van Gaal, precisamente a quien el sábado le ganó la Liga de Campeones de Europa en la final Inter-Bayern Munich (2-0).

De Robson y Van Gaal aprendió a tratar al grupo, pero especialmente a quitar presión a los jugadores.

Tras dejar el Barcelona en verano de 2000, decidió buscar ser protagonista principal del banquillo. Inició sin éxito en el Benfica (de septiembre a diciembre de 2000), se fue al Leiria (junio 2001 a enero 2002), hasta que finalmente el Oporto le dio una nueva oportunidad.

En el Oporto ya surgió el Mourinho triunfador. Mostró su método como entrenador y protagonista, surgió el personaje polémico con los medios informativos, incluso críticos con rivales, pero dominador de vestuario. Algo que, quieres le conocen, dicen dista mucho de como realmente es en las "distancias cortas".

Su etapa en el Oporto se cerró con éxito y polémica: en la final conquista de la Liga de Campeones (2004) no celebró el triunfo sobre el campo, al retirarse a los vestuarios tras el pitido final, sabedor ya de que abandonaba el club para fichar por el inglés Chelsea.

En su primera comparecencia ante la prensa como técnico del Chelsea dejó ya claro su carácter: "Por favor, no me llamen arrogante, pero soy campeón europeo y pienso que soy un tipo especial." Le valió el apodo de "The Special One", algo que le gustó y no dudó en hacer suyo.

Al Chelsea del multimillonario ruso Roman Abramovich también le hizo campeón, eso sí a base de "talonario". Le llevó a la conquista de la liga tras cincuenta años de sequía, a la final de la Liga de Campeones. Pero el 20 de septiembre del 2007, por "mutuo consentimiento" con la directiva del club, abandonó el club inglés.

En verano 2008 fichó por el Inter de Milán, que ganaba en Italia pero fracasaba en Europa, con un solo mandato: conquistar una Liga de Campeones que el club no lograba desde hacía más de cuarenta años.

Tras ganar dos ligas nacional, y justo una vez devuelto al Inter a lo más alto de la cima europea, Mourinho vuelve a dejar un equipo en pleno éxito.

Ahora le toca hacer lo propio con un Real Madrid que desea sus triunfos, que le espera como un "salvador", y que le ve como el único posible de eclipsar al Barcelona.

"Estamos convencidos de necesitar un nuevo impulso....

estabilidad es ganar y ser lideres en Europa y en todo el mundo", dijo Florentino Pérez. Hablaba de Mourinho.

EFE
Madrid

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