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Chelsea recibe a Wigan, que buscará dar la sorpresa de la temporada
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Chelsea recibe a Wigan, que buscará dar la sorpresa de la temporada

El equipo de Roberto Martínez será el eslabón clave de la última jornada de la Premier, en la que se medirá con el líder, que requiere una victoria para no dejar que el United le arrebate el título.

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06 de mayo 2010 , 06:43 a. m.

El conjunto de Carlo Ancelotti recibirá en su estadio, Stamford Bridge, a unos "Latics" que, a pesar de su decimoquinta plaza, tienen todo lo necesario para aguar la fiesta de los "blues", según opinó Dave Whelan, presidente del Wigan.

Whelan, amigo del técnico del United, Alex Ferguson, descartó en declaraciones al portal deportivo Soccernet, que el resultado de la última carrera por el título esté ya decidido y prometió que el Wigan hará todo lo posible por arruinar el "día del Chelsea".

"Hemos vencido al Chelsea una vez esta temporada, además de al Arsenal y al Liverpool", recordó la máxima autoridad del club.

En el último encuentro del Chelsea ante el Wigan, a principio de esta temporada a domicilio, los hombres de Martínez se llevaron los tres puntos con una victoria por 3-1, a la que contribuyó el colombiano Hugo Rodallega con el segundo gol para los "Latics".

Para proclamarse campeón de la Premier League, por primera vez desde 2006, el Chelsea debería salir vencedor de esta 38 jornada de liga si también el United ganara en Old Trafford ante el Stoke, décimo en la tabla tras vencer al Fulham por 0-1 en un partido aplazado.

Podrían darse aún otras circunstancias que seguirían beneficiando a los hombres de Ancelotti.

Si tanto el Chelsea como el Manchester United empataran en sus respectivos encuentros, los "blues" mantendrían su ventaja por un punto. También un empate del Chelsea y una derrota de los "Diablos Rojos" otorgaría el título a los, hasta ahora, primeros.

Mientras, los "Red Devils" no pierden la esperanza de proclamarse campeones de liga por cuarta temporada consecutiva y alcanzar con ése su decimonoveno título de Premier.

"Hicimos nuestro trabajo que es todo lo que podíamos hacer y ahora debemos esperar que algo ocurra el próximo domingo. Vivimos de la esperanza", dijo el defensa del United Gary Neville al diario "The Sun".

"Tras un empate con el Blackburn hace unas semanas pesábamos que habíamos perdido todas las opciones, pero al menos estamos en ello", añadió.

Sin embargo, su compañero Wayne Rooney se lamentó de que hayan perdido siete partidos esta temporada y parece confiar menos en su aún posible victoria: "Si hubiéramos podido ser más constantes y no haber perdido tantos juegos habríamos ganado la liga".

El Tottenham, que se aseguró una plaza en la próxima fase previa de la Liga de Campeones al afianzar su cuarto puesto en la Liga inglesa ante el Manchester City, podría incluso en esta última jornada hacerse con la tercera posición.

Si los "Spurs" vencieran ante el Burnley, penúltimo en la tabla, y el Arsenal pinchara en su encuentro con el Fulham, el conjunto de Harry Redknapp, al frente del Tottenham desde octubre de 2008, se clasificaría para jugar la 'Champions League' la próxima temporada sin necesidad de tener que disputar la fase previa de ese campeonato.

En tanto que el Everton, en el que ahora milita el español Mikel Arteta y que jugará el domingo con el Portsmouth, se perdió la Liga de Campeones en 2005 al no superar ese obstáculo, el tercer puesto de la liga sería un gran premio para el Tottenham.

El Manchester City, decepcionado tras perder toda opción para la cuarta plaza, no tendrá que preocuparse en su cita ante el West Ham de mantenerse en terreno con acceso a la Liga Europa, una meta que tiene asegurada, igual que el Aston Villa y el Liverpool antes de jugar con el Blackburn y el Hull, respectivamente.

El conjunto de Rafa Benítez, sumido en un mar de incertidumbre sobre el futuro de su técnico, su propiedad y muchos de sus jugadores, sólo puede aspirar a terminar sexto en lugar de séptimo en la liga.

En la zona más baja de la tabla ya no hay nada en juego. El West Ham, decimoséptimo ahora, se libró ya del descenso, que sí vivirán el Hull, el Burnley y el Portsmouth, último clasificado y con una deuda de 120 millones de libras (137 millones de euros).

EFE

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