En tierras alemanas se jugó un Mundial con 32 seleccionados. En lo organizacional el campeonato fue un éxito con estadios espectaculares y con un orden propio de los europeos. Franz Beckenbauer se convirtió en el alma y vida de la Copa Mundo antes y durante del certamen.
En lo futbolístico, los cuatro primeros lugares los ocuparon seleccionados europeos. Brasil, siempre favorito y con Ronaldinho como gran referente, pasó sin pena ni gloria y terminó eliminado por Francia, que ganó 1-0 en los cuartos de final.
Argentina, por su parte, tampoco cumplió con las expectativas al quedar por fuera de la competencia a manos del anfitrión Alemania. La albiceleste cayó 4-2 en la definición por penaltis después de un 1-1 en el tiempo reglamentario.
Como una de las grandes sorpresas se erigió el seleccionado de Ecuador, dirigido por el colombiano Luis Fernando Suárez, que pasó la primera ronda y en octavos de final le puso las cosas complicadas a Inglaterra, que solamente pudo vencer a los suramericanos por la mínima diferencia.
Contrario a todos los pronósticos, la Selección de Alemania no alcanzó su objetivo de llegar a las fase definitiva. Los 'teutones' cayeron 2-0 frente a Italia, que a esa altura mostró que sus aspiraciones eran reales y que con el correr del torneo ganó fortaleza en todas sus líneas.
Francia, por su parte, eliminó 1-0 a Portugal, que llenó la retina de los aficionados por su buen fútbol y efectividad y que tuvo como grandes figuras a Figo y a Cristiano Ronaldo.
La gran final entre italianos terminó con un marcador 1-1, en los 90 minutos reglamentarios y tras el alargue de media hora, y en la definición por penaltis la 'azurri' consiguieron su cuarto título mundial con un 5-3 a su favor.
El principal hecho de la finalísima lo protagonizó el estelar Zinedine Zidane, quien cuando el reloj marcaba el minuto 110 le propinó un cabezazo en el pecho a Marco Materazzi, defensa italiano, y vio la tarjeta roja de parte del argentino Horacio Elizondo.
Más allá de las postales e imágenes de las celebraciones de Italia, en cabeza de su técnico Marcelo Lippi, todo el mundo le dio especial trascendencia al acto de 'Zizou', un caballero dentro y fuera de los terrenos de juego durante toda su carrera deportiva.