Con el partido a punto de finalizar, con marcador de 2-1 a favor del Atlético Bucaramanga, Peralta agredió al delantero vallecaucano Henry Solís, del Atlético La Sabana, que lo persiguió y le devolvió la agresión.
Si bien el árbitro Miguel Guevara no se percató de la acción, el reporte fue hecho por Eduardo Díaz, asistente número uno. De inmediato, el central exhibió la cartulina roja para ambos futbolistas.
En su reporte, el árbitro expresó que la falta cometida por Peralta y Solís había sido "conducta violenta contra otro jugador", que según el reglamento disciplinario del torneo se castiga con dos fechas.
Como Peralta ya había sido expulsado en el torneo por esta misma causa en dos ocasiones, esta segunda reincidencia le salió muy costosa: sanción de cuatro fechas (no podrá estar en la final contra Cortuluá y dejará pendientes otras dos para 2010) y multa de 172.259 pesos.
Por su parte, Solís, que ya no actuará más esta temporada luego de que su equipo quedara eliminado, cumplirá su sanción el año venidero. A él le fueron impuestas dos jornadas y una multa de 107.662 pesos.
El tercer expulsado de ese partido, el volante Yeison Chacón, de Bucaramanga, solo purgará una fecha de sanción (vio la roja por doble amonestación, es decir, conducta incorrecta). Eso lo habilita para actuar en el partido de vuelta contra Cortuluá, el fin de semana, si el técnico Jesús 'Kiko' Barrios así lo estima conveniente.
El partido de vuelta entre Bucaramanga y La Sabana dejó, además de los tres expulsados mencionados, un total de seis amonestados, tres por bando.
Así, concluidos los 26 partidos previstos en la Copa Premier II, en total fueron amonestados 1.272 jugadores y expulsados, 157. El líder del rubro de indisciplina fue Bogotá FC, eliminado en los cuadrangulares, que acumuló 104 tarjetas (90 amarillas y 14 rojas). Bucaramanga fue cuarto (90) y La Sabana, noveno (80).