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Atlético La Sabana y Bogotá quieren demostrar que no son las 'cenicientas'
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Atlético La Sabana y Bogotá quieren demostrar que no son las 'cenicientas'

Ambos se clasificaron en la última jornada con sendas victorias y ahora intentarán dar la sorpresa en un grupo que no los considera como los favoritos.

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10 de octubre 2009 , 07:15 a. m.

Atlético La Sabana tuvo que esforzarse para vencer a Rionegro el pasado miércoles para asegurar su cupo en los cuadrangulares. Al final, el triunfo además le permitió ocupar la honrosa segunda casilla del Grupo B, que fue encabezado por Centauros. Un justo premio para la buena campaña del conjunto dirigido por Víctor González Scott, que con una nómina sin grandes figuras y sí muchas jóvenes promesas de la cantera logró llegar a un punto muy alto. 

Tras ser uno de los visitantes más temidos y respetados en el primer semestre, el cuadro sucreño basó su buena campaña del segundo semestre en su fortaleza como local. En el estadio Arturo Sierra Cumplido, el mismo escenario donde este domingo recibirá a Bogotá FC, ganó seis partidos y empató tres, para un rendimiento del 77,8 por ciento; anotó 22 goles y solo encajó 9. Si mantiene esa tendencia, no cabe duda de que está en capacidad de sorprender a los favoritos. 

Haber llegado a esta instancia ya es ganancia para Atlético La Sabana. Sin embargo, el grupo no se conforma. Con la misma humildad que los ha caracterizado a lo largo del año, los jugadores saben que están frente a una oportunidad que quién sabe si se vuelva a presentar. Además, en un duro Nonagonal B, con rivales como Centauros, Unión Magdalena, Academia, Expreso Rojo, Rionegro y el campeón Cortuluá, supieron ser protagonistas.

Bogotá, por su parte, tratará de extender su buena racha, que se manifiesta en un invicto de nueve jornadas, durante las cuales obtuvo cinco victorias y cuatro empates. El equipo de Oswaldo Durán regresa a la fase semifinal (de la que estuvo ausente en las dos últimas ocasiones) con una serie de tres victorias, incluida una en el patio del favorito Itagüí Ditaires, un rival con el que se volverá a enfrentar.

Tras un buen comienzo, a mediados de la primera vuelta el equipo se vino abajo y perdió su estilo de juego. La derrota en el clásico contra Academia, de local, parecía ser el comienzo de una crisis, pero resultó todo lo contrario; luego de esa caída, el equipo se transformó, apareció la experiencia de su columna vertebral y de la mano de los mayores los jóvenes crecieron para conformar un equipo difícil de vencer. 

Tanto les costó regresar a los cuadrangulares, que los jugadores de Bogotá están con un ánimo de revancha increíble. No quieren desaprovechar esta oportunidad que se les presenta, menos en un momento futbolístico tan favorable como el que atraviesan. Si no aparecen de nuevo las repetidas suspensiones y el grupo mantiene el nivel y la humildad, a nadie debería extrañarle que este equipo llegue a la final de la Copa Premier II.

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