En un torneo que ya tenía campeón, el Manchester United, desde el pasado fin de semana, se decidía este domingo la supervivencia en la zona baja de la clasificación general de Inglaterra.
Se libró el Hull City, que se batía ante el flamante finalista de la Liga de Campeones, un Manchester United que afrontaba el último día de curso con tranquilidad bajo la mirada atenta de su "mister", el escocés Alex Ferguson.
Los "diablos rojos" cumplían un mero trámite. Con su tercer trofeo liguero consecutivo bien asegurado desde el pasado sábado, reservó, con vistas a Europa, a sus grandes figuras ante un Hull que se jugaba la supervivencia.
Mientras que el club anfitrión, un debutante que arrancó esta campaña como el conjunto revelación de la Premier League, tuvo que dejarlo todo en el campo, el Manchester optaba por una alineación extraña, en la que finalmente no estuvo el central inglés Rio Ferdinand por lesión -haciendo temer por su inclusión en el once del próximo miércoles en Roma- ni otros "crack" como el portugués Cristiano Ronaldo o Wayne Rooney.
Para la formación de Ferguson marcó en el primer tiempo Darren Gibson, un hombre que anotó su primer gol en este torneo con la camiseta del Manchester el último día de curso.
El marcador en contra pudo haber sido fatal para el Hull, que se benefició de la poca fortuna del Newcastle United, club que ha tenido que decir adiós a este torneo después de 16 años en la máxima competición inglesa.
El destino de la entidad de St James'Park se decidió en un estadio ajeno, Villa Park, donde los hombres que dirige el irlandés Martin O'Neill actuaron de verdugos del once entrenado por un Alan Shearer cabizbajo, que agotó sin éxito el último cartucho para continuar en esta categoria.
No pudo ser. Una negligencia fatal en el primer tiempo del irlandés Damien Duff, que marcó en su propia meta, dio un 1-0 a favor de los "Villanos" y sentenció a este equipo, que además perdió a un jugador en el segundo tiempo por doble amonestación.
Por su parte, el Aston Villa afianzó el sexto lugar de la tabla nacional con 62 puntos.
En el estadio de Anfield, el internacional español Fernando Torres contribuyó a la victoria del once local por 3-1 con un espectacular remate de cabeza ante el Tottenham Hotspur.
Los "reds" del español Rafael Benítez cierran así un curso que no les ha reportado ningún trofeo pese al excelente rendimiento de la plantilla de Anfield.
Además del tanto de "El Niño", al marcador del Liverpool se sumó un gol en propia meta del jugador "spur" Alan Hutton, en el segundo tiempo. El israelí Yossi Benayoun marcó un tercero.
Otro gigante de la "Premier" que se despidió de la campaña a lo grande fue el londinense Arsenal que capitanea el centrocampista español Cesc Fábregas.
Los "Gunners" se pegaron un festival de goles ante su hinchada frente al Stoke City en su estadio del Emirates (4-1).
Aunque abrió el marcador local James Beattie, que marcó en su propia portería, el holandés Robin Van Persie puso firma a dos goles para el once del francés Arsene Wenger; y rubricó el otro el francés Vassiriki Diaby.
Por su parte, el Blackburn Rovers dijo adiós en Ewood Park ante el West Brom, colista del torneo y que ya estaba relegado a la segunda división, con un empate sin goles.
En el estadio londinense de Craven Cottage, el anfitrión Fulham caía por 0-2 ante el Everton de David Moyes, que consolidó el quinto lugar de la general.
Pese a la derrota, el Fulham concluye el torneo en séptima posición liguera, la mejor que logra esta entidad en años.
El Manchester City se imponía en casa por 1-0 al Bolton Wanderers, mientras que el Chelsea del holandés Guus Hiddink ganaba su cita a domicilio con el Sunderland (2-3).
En Londres, el West Ham United hundió al Middlesbrough por 2-1, que condenó al "Boro" a la segunda división.
Por último, el Wigan cerró la temporada con victoria, un 1-0 en casa frente a su rival Portsmouth.
EFE
