"Una de las principales claves de un control antidopaje eficaz es el efecto sorpresa y la capacidad de controlar a un atleta sin preaviso los 365 días del año", declaró John Fahey en un comunicado.
"Pedir, como hacen la Fifa y la Uefa, que los controles tengan lugar solamente en los terrenos de entrenamientos y no durante los periodos de vacaciones es ignorar la realidad del dopaje en el deporte", continuó Fahey.
"La experiencia prueba que los atletas que se dopan lo hacen cuando piensan que no van a ser controlados", añadió.
Desde el 1 de enero de 2009, un pequeño grupo de deportistas de alto nivel, elegidos por la federación o la agencia antidopaje de su país, deben dar, a través de un sistema informático encriptado, su agenda de los tres siguientes meses adjuntando cada día, la hora y el lugar donde se encuentran.
El martes, la Fifa y la Uefa rechazaron formalmente en un comunicado común las "localizaciones individuales", y quieren que se reemplacen por "localizaciones colectivas, es decir, dentro del equipo y en la infraestructura del estadio".
"La AMA está sorprendida e inquieta al leer este comunicado", subrayó la propia agencia.
Ginebra
AFP