Con mucho esfuerzo del plantel, apoyado en esa fuerza por no dejar caer el equipo a la categoría B, en este 2013 superamos a ese ‘fantasma’ del descenso y seguimos en primera división.
En 2013 logramos 40 unidades, pero sobre todo se consolidó un entrenador de la región y que hay que destacarlo. El profesor Virgilio Puerto llegó para dar una gran mano luego de los malos resultados de Javier Álvarez y así logramos levantar, con su dirección y con el aporte de los jugadores.
Por eso, asistir al estadio 'Guillermo Plazas Alcid' es una de nuestras mayores emociones. La fidelidad y el apoyo incondicional al equipo es la razón de nuestra felicidad. Eso sí, hay que reconocer que en los últimos años la gente no ha regresado como se espera al estadio y eso es algo a corregir. Hay que volver en familia.
En tan solo 18 años de historia, mi Atlético Huila me ha ofrecido más alegrías que tristezas.
Y esto lo digo porque desde que arrancó el equipo, el 29 de noviembre de 1990, en Neiva, la pasión ha crecido de tal forma que ahora ya se ven más camisetas amarillas que las de los famosos rivales que visitan nuestro estadio.
Recuerdo el furor provocado cuando logramos el título en la categoría B en 1992. Alberto Rujana, director técnico de aquel equipo, nos puso de moda en todo el país. El equipo logró el ascenso con números perfectos, incluida aquella goleada 10-0 al desaparecido club Dinastía que quedará en la historia. Guillermo Berrío se proclamó como el goleador del campeonato con 18 goles y el arquero Walker Cuesta solo recibió 16 anotaciones en 28 partidos disputados. La Vuelta olímpica, siempre recordada, en una tarde sol la conseguimos tras un triunfo 2-1 sobre Alianza Llanos.
El debut en la A no pasará tampoco inadvertido. Aquél 21 de febrero enfrentamos al América y pese a perder 0-1, aquella fiesta de ver en nuestro consentido estadio 'Guillermo Plazas Alcid' a uno de los grandes del fútbol nacional fue estupenda. Luego, en la segunda fecha de ese torneo en 1993, derrotamos 1-3, como visitantes, a Deportivo Pereira y ese fue el primer triunfo en el fútbol de primera división.
En ese mismo año, también tengo bien presente en mi memoria aquellos partidos en Bogotá. Las interminables caravanas hacia 'El Campín' convocaron ríos humanos que fueron reconocidos en los distintos medios deportivos como una 'fiebre amarilla' pocas veces vista. Nuestro prócer futbolero, Guillermo Berrío, comandó el fútbol en la cancha y nosotros, más de cinco mil hinchas, dijimos presente en la ahora 'casa' de la selección.
En 1994 nuestro equipo tuvo una aceptable actuación con jugadores como Rafael Dudamel y John Édison Castaño, también estaba Acisclo Córdoba y David 'Meneito' Mendoza. Lamentablemente, en el extensísimo torneo de 1996-1997 nos fuimos al descenso, pero logramos levantar rápidamente y en diciembre del mismo año fuimos campeones de la categoría B, en el famoso torneo 'Adecuación'.
Tras el descenso bajo la dirección técnica de Álvaro Prieto, quien dirigió la parte final, luego de la salida de Nelson Abadía, se pensó lo peor. Ese equipo tenía a Jorge Leiva como arquero, Severino Peña comandaba la defensa, Guillermo Berrío la mitad del campo y Guillermo 'Manimal' Cortéz la zona ofensiva. Rafael Corrales fue el encargado de ganar el ascenso.
Luego vinieron años con pocos resultados importantes. La fortaleza de actuar como local pareció terminarse y la aparición de torneos cortos poco ayudó. Eso hizo que los dirigentes 'dolientes' del equipo se alejaran y olvidaran el sentir de los hinchas.
En el torneo Apertura del 2005 conseguimos la primera clasificación a los Cuadrangulares Semifinales, en el torneo Finalización 2006 también clasificamos, pero nos tocó luchar, por primera vez, el juego de la promoción cuando derrotamos sin problemas al Valledupar.
Ese equipo, poco a poco, se fortaleció y bajo la dirección técnica de Néstor Otero obtuvimos el subcampeonato del 2007 luego de caer contra Nacional. Fue una final con un juego de ida donde no actuamos bien, pero con un juego de vuelta en el que ratificamos el por qué llegamos hasta esa instancia.
De ahí mi alegría. De allí mi ilusión para que este equipo siga creciendo. Para que todo el departamento, poco a poco, siga estando adherido al equipo y en poco tiempo podamos festejar nuestro primer título profesional. Una cuenta que espero sea saldada lo más pronto posible.
En 2011 se lograron 39 unidades en la fase regular de los dos campeonatos y en 2012, 41. Hay que volver a armar un equipo digno, como se lo merece la hinchada y como pretendemos sea siempre.
