Bournemouth se impuso este sábado por 0-3 a Charlton y se coronó en campeón de la Championship, Segunda Categoría del fútbol inglés, en la última jornada, y certificó su ascenso a la Premier League siete años después de estar a punto de desaparecer.
El conjunto entrenado por Eddie Howe, de 37 años, ya celebró el ascenso el pasado lunes, cuando goleó 3-0 en casa al Bolton Wanderers, aunque éste no se certificó hasta este sábado.
Solo una catástrofe podía evitar la promoción de Bournemouth, ya que su más inmediato perseguidor, Middlesbrough, de Aitor Karanka, tenía que recuperar en la última fecha del campeonato una diferencia de 19 goles con los 'cherries'.
En febrero del 2008, el club de esta ciudad costera del sur del Reino Unido, que militaba en la League One, Tercera División de Inglaterra, estuvo a punto de desaparecer al haber acumulado deudas que ascendían a más de cuatro millones de libras (6 millones de euros) y ser sancionado por la Liga con 10 puntos.
Los problemas se acrecentaron ese mismo curso al descender a la League Two, la que comenzó con una diferencia de -17 puntos al haber sido multado nuevamente por estar en bancarrota. Sin embargo, la llegada al banquillo de un antiguo jugador, Eddie Howe, quien había defendido la camiseta de Bournemouth en más de 250 ocasiones y quien se convirtió, con solo 31 años, en el entrenador más joven en la historia del balompié británico, cambió la historia de este modesto club.
"Es el equipo que animaba de pequeño, el que me dio la oportunidad de ser futbolista y entrenador", recordó Howe tras el triunfo sobre Bolton. "Ha sido un viaje que no esperábamos. Sin embargo, gracias al trabajo duro y a las inversiones lo hemos podido conseguir. No tienen nada por lo que darme las gracias. Bournemouth es un club familiar y se merece este momento", sostuvo el técnico.
En la temporada 2009-2010, Bournemouth recuperó su puesto en la League One y solo un año después jugó las eliminatorias de ascenso para subir a la Championship. No lo lograron, pero los 'cherries' lo siguieron intentando, y dos temporadas más tarde certificaron su ascenso a la categoría de plata del fútbol inglés después de 24 años de su última participación.
Ahora, en una temporada en la que la premisa era salvar la categoría, logró situarse a la altura de los grandes, como Middlesbrough, Norwich, Watford, Fulham o Leeds, y pelearles el ascenso.
Sin futbolistas de renombre y en el que será el estadio más pequeño de la Premier League, el Dean Court Ground, con capacidad para 11.000 espectadores, Bournemouth recibirá a partir de la próxima temporada a conjuntos como Chelsea, Manchester United, Arsenal o Liverpool, solo siete años después de estar a punto de desaparecer.
EFE
