El Aucas ecuatoriano será desde hoy, y probablemente por los próximos tres meses, el vigésimo equipo del uruguayo Sebastián Abreu, un 'trotamundos del fútbol' ya que a los 38 años llega con su fútbol al octavo país tras jugar en clubes de Argentina, España, Brasil, México y hasta Israel y Grecia.
En su natal Uruguay 'el Loco' Abreu saltó al profesionalismo en 1994 desde las filas del Defensor Sporting y, como 'el hijo pródigo', volvió en cinco ocasiones más para reforzar al Nacional. A partir de hoy su nuevo desafío es ayudar a enderezar el rumbo del Aucas, el colista de la Liga, con dos puntos de dieciocho posibles, en cuyo banquillo está el uruguayo Juan Ramón Silva.
"Espero que Aucas y el cuerpo técnico compatriota me de la oportunidad para seguir disfrutando de lo que más quiero que es estar dentro de la cancha, sentir la sensación de ser futbolista profesional y experimentar un nuevo país, nueva ciudad y un nuevo club", dijo el hombre que ya militó en los mexicanos Tecos, Cruz Azul, América, Dorados de Sinaloa, Monterrey, San Luis y Tigres.
El exjugador del Deportivo La Coruña y la Real Sociedad, el River Plate, el San Lorenzo y el Rosario, así como el Gremio y el Botafogo, minimizó la crisis de su nuevo equipo y confió en que aún hay posibilidades de elevar el nivel futbolístico. "Existen detalles corregibles que, una vez que se pulan, el equipo va a levantar", apostilló el exdelantero del Beitak israelí y el Aris Salónica griego.
El presidente del Aucas, Ramiro Gordón, explicó que el mediático fichaje de Abreu le resulta "más barato que un jugador local" y lo justificó así: "es porque él ya es un hombre millonario. No es solo cuestión de dinero".
EFE