"El gol fue un momento de euforia combinado con algo de rabia", confesó Brayan Perea tras la victoria sobre el Huila, aunque con un poco de frustración porque una lesión de rodilla le impidió estar en una parte determinante del torneo. Por lo tanto, afirma: "Celebré, pero sé que estoy en deuda".
El partido del domingo no fue nada sencillo para el Deportivo Cali, porque Atlético Huila jugó sin presión y liberado en el medio campo, en el primer tiempo dominó al conjunto 'azucarero' y pudo irse con una ventaja mayor al vestuario. No obstante, en los segundos 45 minutos los caleños despertaron.
"Todos los equipos necesitamos los puntos para una determinada competencia, así que no son enfrentamientos sencillos. El primer tiempo fue del Huila y en el segundo reaccionamos para ganar", acotó Perea.
Lograr los tres puntos fueron un premio a la insistencia y al trabajo en la cancha de los jugadores, sobre todo en el segundo tiempo, además del riesgo que asumió el DT Cárdenas al armar un equipo ofensivo e ir a todo o nada. Aún hay chance de entrar y el partido frente a La Equidad será igual de complicado.
"Hay que jugar con el corazón en la mano, con inteligencia, entrega y sacrificio porque nuestra obligación es ganar y luego esperar a ver qué sucede en otras plazas", remató 'Coco' Perea.
Redacción Futbolred.com
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