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Nondier y Mauricio Romero, del profesionalismo a jugar en la C
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Nondier y Mauricio Romero, del profesionalismo a jugar en la C

Los jugadores vallecaucanos suman su primera temporada con el equipo de la Primera C, Orsomarso.

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05 de diciembre 2014 , 04:37 a. m.

De dicho equipo, hace un par de semanas, el ‘Chiqui’ García promovió al defensa José Torres al América.

Apertura y clausura. Sobresalía Nondier Romero con el equipo de la escuela Jorge Isaac del corregimiento de El Cabuyal (Valle). Y fue escogido para integrar la selección de Candelaria, de donde poco después dio el salto a Águila Roja, que competía en el entonces torneo de ascenso de la Primera C. Tenía apenas 15 años de edad. Hoy suma 35 y ha vuelto al mismo lugar.

Nondier es el espejo en el que se miran los jugadores del equipo Orsomarso –otrora Águila Roja- que compite en el campeonato nacional de Primera C; ostenta el brazalete de capitán, comparte su testimonio de vida, alerta a sus compañeros en el verde rectángulo, ejerce respeto y autoridad.

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Su pasado de sombras y glorias no representa la frustración de su presente. Fue campeón en el balompié nacional con el América y Once Caldas. “Tengo cuerda para rato”, asegura al tiempo que expresa con entusiasmo su deseo de volver a la primera categoría del fútbol colombiano. No obstante, antes desea celebrar el campeonato con Orsomarso. Entonces, se ufana: “Pasaría a la historia como campeón en la A, en la B con el Quindío y ahora en la C”.

Orsomarso es el líder de su zona, posición que le concede uno de los dos lugares para clasificarse a la serie final.

En pos de su nueva gesta, Nondier también les repasa a los integrantes del equipo algunos de sus momentos de desenfreno. “Les digo la verdad a los muchachos sobre cuando yo era jodido, porque me gustaba la calle y la noche. Cuando estuve en mi apogeo, quería estar en las rumbas… Y eso la vida se lo cobra a uno”, testimonia y añade sobre su actualidad: “Ha habido partidos en los que los rivales piden tomarse una foto conmigo, y eso me llena de orgullo. Asimismo, los árbitros lo miran a uno con mucho respeto”.

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El segundo capitán

Contrario a Nondier, Mauricio Romero, el otro experimentado de Orsomarso (35 años), no tiene el mínimo deseo de volver a figurar en la primera categoría. En su palmarés se destacan los tres campeonatos nacionales que logró con América. Actuó en siete clubes de Colombia, uno del Perú, otro de España y dos en Venezuela. Desde hace un par de años –jugando para el América en la B- desistió del fútbol de alta competencia.

“No estoy aquí porque tenga la ilusión de volver a jugar en la profesional. Mi ciclo terminó y ahora tengo otros proyectos de vida. Junto a William Zapata tenemos una academia deportiva con énfasis en fútbol, tenis y servicio de gimnasio”, precisa ‘Romerito’.

Orsomarso, es quizá la primera opción de los jóvenes del municipio de Candelaria y sus lugares aledaños, para mejorar sus condiciones de vida; suma apenas algo menos de dos años de haber sido conformado y cuenta con tres categorías que compiten en los diferentes torneos de la Liga de Fútbol del Valle. Orsomarso es una región del sur de Italia, de donde es originario ‘Pepino’ Sangiovanni, el propietario de la emblemática empresa cafetera Águila Roja, en cuya cancha de fútbol oficia como local el equipo que cumple una loable función social en el citado municipio del Valle del Cauca.

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“Nuestro propósito es lograr un ascenso a la B cuando los dirigentes del fútbol colombiano retomen dicho modelo como incentivo para los que competimos en la C y en aras de que haya mayor competitividad”, sostiene José Gabriel Sangiovanni, director técnico del equipo mayor de Orsomarso.

Nondier y Mauricio Romero escogieron Orsomarso para bajar la persiana en sus fecundas carreras como futbolistas, muchos otros jóvenes acuden al equipo vallecaucano como el faro que ilumine sus vidas. Uno de ellos es José Eduardo Torres, defensor central de 19 años, mide 1,96, vive en Florida, es primo del arquero del Santa Fe Róbinson Zapata, y hace un par de semanas el técnico Luis Augusto el ‘Chiqui’ García lo promovió para entrenar con el primer equipo del América.

“No conozco a mi papá, pero como nosotros somos de muy bajos recursos, una vez lo llamé por teléfono y le pedí que nos ayudara, pero él me respondió que me saliera del fútbol y me dedicara a trabajar, pero ahora, por fortuna el técnico José Gabriel me colabora con una plata para el mercado de mi familia”, comentó Torres, quien sería uno de los refuerzos del equipo ‘escarlata’ para el próximo año. “Al América también han ‘subido’ a Arnold Palacios y Anderson el ‘Chino’ Ramírez, que se formaron en Orsomarso”, indicó Juan Carlos Mejía, gerente deportivo del equipo que es la puerta de entrada y salida de muchos futbolistas.

Héctor Fabio Gruesso
Especial para El Tiempo
Cali

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